OBJETIVOS

 

 La ventilación mecánica es un mecanismo terapéutico al que se recurre cuando el intercambio gaseoso de un paciente es insuficiente para cubrir las necesidades mínimas de oxígeno y anhídrido carbónico, lo que comporta un riesgo vital inminente.

En definitiva la ventilación mecánica nos va ayudar a mantener unos gases sanguíneos aceptables para la situación clínica y hemodinámica del enfermo con las mínimas alteraciones fisiológicas posibles. Y habría que añadir también, con la máxima seguridad y confort posibles.

Los objetivos fundamentales van a ser:

  1. Corregir la hipoventilación alveolar

  2. Mejorar la transferencia alvéolo-capilar de O2

  3. Suprimir el trabajo respiratorio excesivo

  4. Satisfacer la exigencias celulares aumentadas en desequilibrios graves.

Diferencias entre ventilación espontánea y ventilación mecánica

  1. En la ventilación espontánea el aire penetra en el pulmón cuando en el alveolo se establece una presión inferior a la atmosférica (presión negativa). En la ventilación mecánica el aire ha de ser introducido por el ventilador, ello requiere superar la presión atmosférica, por consiguiente la inspiración se efectúa a presión positiva

  2. En la ventilación espontánea el trabajo respiratorio es realizada por la musculatura respiratoria, en la ventilación mecánica por el ventilador.

  3. En la ventilación espontánea un aumento en las resistencias de la vía aérea (secreciones, broncoespasmos, etc) incrementará el trabajo respiratorio y en la ventilación mecánica será preciso, para superar estas resistencias, aumentar la presión positiva en la vía aérea.